El consumo de agua por vivienda va a depender de la cantidad de personas que la habiten, es decir, de la familia o de los ocupantes de la misma. También dependerá de los hábitos de consumo que tengan y del precio que paguen por el servicio de agua. Vamos a analizar, en términos generales, el consumo de agua por vivienda.
¿Cuál es el consumo medio de agua por vivienda?
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Cada vivienda registra un consumo promedio mensual de agua y puede ser más o menos dependiendo del uso que de ella se haga. Según el Instituto Nacional de Estadística de España el promedio de consumo de agua en una familia española es de 132 litros por persona y día.
Es evidente que, a un mayor costo del agua, las personas tratan de ahorrar y no desperdiciarla. En los lugares donde el agua es muy barata se tiende a desperdiciar mucha agua y a no darle el valor que tiene.
Lo contrario sucede en localidades donde no hay manantiales de agua próximos o no les llega en cantidad suficiente. El precio a pagar por el servicio es elevado y la conciencia de lo valiosa que es el agua es mayor.
En 2017, un estudio de Eureau realizado en algunos países europeos destaca que la media de consumo por persona es de 128 litros al día.
Se puede decir que el consumo de agua es sostenible en algunos países europeos, pero no en otros en donde la sequía afecta la población, la agricultura y el empleo, habiendo reservas de agua cada vez más bajas, como es el caso de Andalucía.
¿Cuántos litros de agua consume una familia?
El consumo de agua por familia va a depender del número de personas en la familia, si hay niños o no, o de si la vivienda cuenta con piscina, jardín o huerto.
Según la OMS, una persona consume un promedio de entre 50 y 100 litros diarios de agua, si en una familia hay 4 personas serían 400 litros de agua diarios en la cantidad máxima. La OMS destaca que una ducha debería durar 6 minutos, pero por lo general dura 10 minutos.
El acortar el tiempo de la ducha es importante, así como aprovechar el agua que cae y recogerla en un balde para luego reutilizarla para otras actividades en el hogar. Es crucial reconocer en la familia en qué áreas de la casa se gasta más agua e intentar reducir el consumo excesivo.
En el baño y en la cocina se suele gastar más agua que en otros lugares de la casa, por las duchas o baños de tina y por el lavado de la vajilla, ollas y el uso de lavavajillas y la lavadora.
La familia debe tener conciencia de ahorro en el consumo de agua, no solamente por el pago de la factura, sino por lo vital que es el agua para la vida y para la naturaleza.
Pensar que en otros países hay personas que carecen de este vital recurso puede servir para que los niños tomen perspectiva del desigual acceso al agua que existe en el planeta.
Crear buenos hábitos de consumo, incentivarlos y mantenerlos en el hogar entre todos los miembros de la familia, hará que el consumo de agua por familia sea racional.
Puedes consultar también algunos trucos y consejos para ahorrar agua en casa.
¿Crees que estás consumiendo el agua que necesitas cada día o, por el contrario, estás malgastando?
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